Este es mi homenaje a papá, a
propósito que dentro de poco estaremos celebrando su día. Aunque pienso, que al
igual que el día de la madre, debería de celebrarse todos los días, ya que el
papel de los papis en la crianza de los niños, es tan importante como el de las
mamis.
César es un súper papá, aunque a
veces, o mejor dicho muchas veces, quiera hacerme desaparecer cuando le digo a
Luciano: dile a tu papá, justo cuando el acaba de sentarse a leer el periódico,
o me lance una de aquellas miradas que dan miedo cuando le digo: a papito le
encanta jugar a eso Lu y acá entre nos, no es que yo sea una bruja que está
pensando: mua ja ja voy a esperar que se siente para mandarle a Lu, nooo, aunque
parezca, les juro que no jajaja…
La verdad del asunto es que
escucho tantas veces a Luciano en el día, cuando su papá está trabajando
preguntar por él, lo veo imitarlo tanto, buscar siempre su mirada, su compañía,
que no puedo resistirme, siento que todo el tiempo que él está en casa, debería
dedicárselo exclusivamente a él y nada más, que deberían de jugar a los
carritos, a la pelota, a los trenes, a cantar, a pasear, a lo que sea, que no
debe cansarse, en fin, la lista es interminable y a decir verdad me sale el
lado neurótico, debo admitirlo y por momentos, (está bien, bastantes momentos),
quiero controlarlo todo, decirle a César como debe jugar con él, a donde debe
llevarlo, que debe darle de comer, que no debe darle, como debe enseñarle tal
cosa…. Es de locos! Como me aguanta?
Jajaja no se!!!! Y eso que antes era
peor, antes le decía como bañarlo, como cambiarlo, como prepararle la leche,
como peinarlo y mejor no sigo! jajaja
Pero ayer, por fin, vi la luz! Jajaja
Comprendí cuán equivocada estoy! Es que los papás también nacen sabiendo ser
papás! Es que ellos pueden ser increíbles también (a su manera claro!!!) Y es
que si empiezo a sumar todo lo que Luciano y papá hacen juntos y aprenden a
hacer mutuamente, me quedo sin palabras, ¿cómo lo explico?
Es tan fuerte el ejemplo de papá,
que a veces hasta me da miedo. Cesar le enseña a Luciano cosas que ni siquiera
el mismo sabe que le enseña, aquí van algunas: trato de ponerle gorro a mi hijo
toda la semana, llega el fin de semana, papá se pone el gorro y Luciano mágicamente
quiere usar gorro, así sin chistar, alguien puede explicarme como y porque?
César va al baño obviamente, como todos los hombres, parado y Luciano, quiere
ir al baño parado, el pobre no llega ni a la mitad, con sus 85cmts quiere pararse
en el baño! Pero no quiere su baño, quiere el baño de papá! jaja César se sienta a leer el periódico y Luciano
quiere leer el periódico, Cesar le da de comer a los peces, Luciano quiere
darle de comer a los peces, César asomó su cabeza por la ventana y Luciano
asomó también. Es por eso que me da tanto miedo, es increíble, la influencia
que puede tener Cesar sobre Luciano, me sorprende y me enorgullece porque sé
que Luciano llegará a ser un gran hombre como lo es su padre.
El otro día en el nido le pusieron la corbata
de papá y el gordo regresó vestido como papá, a mí se me caía la baba claro, y
el todo el día estuvo maravillado de estar como papá, no cabía en sí mismo. Ahora
entiendo esas frases que dicen que papá es un héroe y en momentos en que los
veo juntos no saben lo que siento, se me derrite el corazón como mantequilla, me encanta verlos explorar juntos en la playa,
recoger caracoles en el parque, jugar a los carritos, ver animalitos en el
zoológico, jugar en las maquinitas, manejar juntos el carro, escuchar música, ese código secreto
con el que a veces hablan, las risitas escondidas cuando han hecho una
travesura, ver televisión juntos, el “abrazo padre e hijo” que han inventado y
ver a César convertido en un niño y a Luciano convertido en su mejor amigo es
demasiado para mi corazón! Como olvidar que fue César quien me enseñó a bañarlo
cuando yo tenía miedo de hacerlo y fue el quien me enseñó a cortarle las uñas y limpiarle las orejas, todas las noches que se levantaba
conmigo (a regañadientes claro) en la madrugada a darle la leche, o los días que
le ha cambiado el pañal (claro que ahora negocia, si es pichi yo sino, a la yan
ken po) o le ha dado la comida con avioncito incluido y todo!
Que vivan los papás chochos, los
papás que hacen todo bien o todo mal, los papas que se embarran hasta los huesos cuando
cambian el pañal o lo hacen al revés, que vivan los papas que terminan
empapados cuando los bañan y dejan todo el piso mojado, los que terminan
vomitados después de tratar de hacerlos dormir y dicho sea de paso se duermen
antes que los bebés a quienes intentaban dormir, los papás que pusieron más
leche en menos agua o le dieron pizza en la noche para no preparar comida, los
papas que no llevan maletines para cambiar a los bebés cuando salen solos, los
papás que dijeron que estuvieron viendo dibujos cuando estuvieron viendo todo
menos eso, los papás que después de un día largo de trabajo tienen el tiempo suficiente para llegar y jugar con sus hijos, o miles de cosas más, porque ellos son inmensamente grandes, están
aprendiendo a vivir en nuevo mundo sin miedo y con valentía, aprendiendo a ser
perfectos!
Que vivan aquellas grandiosas
mamás que son papás también y que viva mi esposo, el amor de mi vida y mí Luciano, porque con un hombre
tan maravilloso al lado, no me queda duda que el también será un excelente
papá.
Así que mi consejo es, dejemos a
papá ser papá, aprendamos que ellos son diferentes a nosotras, que hacen las
cosas diferentes, que piensan diferente, que actúan diferente, pero que aman a
sus hijos tanto como nosotros. QUE VIVAN LOS PADRES FELICES!